lunes, 22 de febrero de 2021

Feeling Through

 


Cortometraje acerca de la empatía en medio de la cotidianidad.


Dirigido por Doug Roland, ‘Feeling Through’ está en la lista de preseleccionados a mejor cortometraje para los premios de la Academia, que se realizaran en abril de este año, y ya fue ganador en la categoría ‘Mejor actor principal para un cortometraje’, en los festivales de Port Townsand y Lake County (2020).

Su emotiva historia de tolerancia evidencia la importancia de las pequeñas acciones para la vida de quienes más lo necesitan. Sucede una noche de otoño de 2019 cuando el joven neoyorkino Tereek (interpretado por Steven Prescod) sale de pasar un rato con sus amigos y desesperadamente busca llegar a casa de su novia para estar con ella, pero algo lo impide.

Justo camino a la estación de bus encuentra a un hombre ciego y sordo, llamado Artie (interpretado por Robert Tarango, la primera persona ciega y sorda en aparecer en un cortometraje en la historia del cine), quien con un cartel escrito busca la ayuda de alguien que lo lleve a tomar el bus M15 para ir a casa. 

Esta situación será el detonante para un despliegue de humanidad, donde el joven Tereek pasará de una comunicación basada en mensajes de textos, charlas con sus amigos e influenciada por la tecnología, a tener que recurrir a sus conocimientos en lenguaje para personas ciegas y su intuición.

El conflicto de este cortometraje, que se puede apreciar en el link: https://www.youtube.com/watch?v=h1CqzntEZZ8, incluye el sacrificio de quien olvida por unos instantes lo que más deseaba hacer en el día para hacerse partícipe de la vida de quien anhela regresar a casa y reencontrarse con quienes más ama. Así, la historia de dos hombres totalmente opuestos se ve interconectada por la casualidad, en emotivas escenas que recuerdan lo difícil que puede ser el mundo para todos, pero también el aporte que las personas comunes y corrientes pueden dar para hacerlo un poco mejor. 

Por consiguiente, esta historia que resalta las calles de Nueva York y las anécdotas de sus habitantes, por encima del glamour de los grandes edificios, revela la simplicidad de la comunicación escrita, dando preponderancia a las frases cortas pero intensamente humanas; contraponiendo la tecnología, que aísla con las notas de una agenda, a los códigos del tacto, que producen un mensaje más auténtico de solidaridad.

Sin duda, una interesante narración audiovisual, acompañada de un relato plenamente emocional, donde los personajes aprenden, mediante la empatía, el valor de la humanidad. 

Solo una pequeña falla argumentativa se presenta, al no contextualizar apropiadamente la manera como el Tereek conoce bien el lenguaje para comunicarse con una persona invidente mediante el tacto de sus manos; pero, esto no le resta a ‘Feeling Through’ el gran impacto emocional que puede causar en las audiencias y la compleja red de conexiones emocionales que produce esta narración.

Allí se exalta un mensaje de empatía, que lamentablemente hoy se ha ido perdiendo ante las problemáticas del mundo moderno, que permean todos los entornos en los que se habita día a día, como una calle perdida de una ciudad, una estación de bus e incluso el transporte público. Estos lugares, para muchos fríos escenarios de la vida diaria, son transformados en la producción de Doug Roland en sitios de encuentro humano y cohesión social. 

A. Galindo

viernes, 29 de enero de 2021

Coming Clean


La tragedia humana de la adicción a los opioides

En 2019, solo en Estados Unidos se registraron más de 72.000 muertes por adicción a sustancias como heroína, morfina y algunos medicamentos opioides, y para el año 2020, como consecuencia de los confinamientos impuestos por algunos estados debido a la pandemia por la COVID-19, se registró un aumento de tres mil muertes adicionales. 

 Una problemática alarmante, que llevó a la directora independiente Ondi Timoner, ganadora en 2004 del premio del gran jurado en el festival de cine de Sundance, a abordar este tema en su más reciente documental ‘Coming Clean’, que se estará en plataformas digitales y en salas de cines especializadas desde el 22 de enero de 2021.

Allí se aborda, desde diferentes aristas, el mundo de la adicción a las sustancias opioides, que incluyen un amplio grupo de drogas ilegales, como la heroína, pero también medicamentos para el dolor, como la morfina y el fentanilo, disponibles con fórmula médica, y cuyo mal uso suele ser frecuente entre algunos grupos de población, por la falsa sensación de placer que provocan y que hacen que se quiera seguir experimentando, automedicándose constantemente, generando lo que algunos expertos han llamado una epidemia de drogas.

Víctimas de esta adicción, como Destiny Díaz, Trisha Klaus y la madre de la senadora Britanny Pettersen, dan sus testimonios y cuentan sus experiencias, al mismo tiempo que se muestran algunas acciones para superar esta crisis de opioides que demanda respuestas urgentes.

Programas como la redada en el área de ‘Rio Grande’ en 2019, donde Sam Gill, fiscal general de South Lake City, con el apoyo del alcalde de la época y hoy senador Ben Mac Adams,  hicieron una estrategia combinada, atacando no solo el problema de los vendedores de drogas, sino también dándole la oportunidad a miles de adictos a la heroína y otras sustancias de rehabilitarse e integrarse de nuevo a la sociedad, se reflejan en este documental, que quiere llamar la atención de que esta crisis de opioides no solo es un problema legal, sino una epidemia, en donde las personas afectadas necesitan un acompañamiento por parte de la comunidad, sus familias y una oportunidad para empezar de nuevo sus vidas.

También se aborda un origen más de fondo para la adicción, como los abusos en la infancia u otra serie de difíciles traumas psicológicos, a lo que se suman problemáticas de la vida diaria, como un mal empleo, el confinamiento en momentos como los vividos en 2020 por la pandemia, que dejó a las personas sin sustento y muertas de miedo por los efectos del virus, o enfermedades de índole mental como la depresión, cuando no son compartidas o ni siquiera logran ser diagnosticadas; hechos expresados en los testimonios de Gary Fisher, director ejecutivo del centro de rehabilitación Cirque Lodge en Utah, y Bevery Roesch, directora clínica de este centro.

Ondi Timoner logra un montaje visual ameno y lleno de luz, donde cada testimonio y experiencia es presentada al espectador mediante una técnica de animación, de ilustraciones artísticas hechas a mano, con efectos digitales que también contextualizan las opiniones de expertos como el periodista británico Jonathan Hari.

Autor del libro ‘Chasing the Scream’, Hari critica abiertamente la solución punitiva como una manera de manejar el tema del consumo de sustancias opioides para quienes son adictos, y recuerda la importancia de construir una red de apoyo, donde amigos y familiares escuchen, orienten y ayuden a quienes tienen este problema.

De igual manera, esta producción hace una reconstrucción histórica de las tres etapas de la adicción a las sustancias opioides, y presenta un punto de vista crítico sobre la permisividad que tienen algunas empresas farmacéuticas al no reforzar a sus usuarios el tema del uso responsable de estas sustancias o los riesgos por un consumo sin las debidas indicaciones médicas o sin los procesos correctos de prescripción. 

Abogados como Mike Moore, especialista en temas legales relacionados con las sustancias opioides, plantea la necesidad de regular ciertos medicamentos con alto contenido de sustancias opioides, para evitar que este tipo de adicción pueda afectar a más ciudadanos de Estados Unidos.

 Por lo tanto, este documental logra un balance entre la faceta humana de quienes sufren por esta otra epidemia, la de la adicción a las sustancias opioides; sus familias, su entorno social con el contexto histórico, legal y académico que genera este problema, haciendo que las audiencias reflexionen sobre la importancia de entender las adicciones desde todas las perspectivas.

También hay un mensaje de esperanza, con la posibilidad de encontrar una salida a esta trágica situación, que como señala el abogado Moore, se ha ido agravando con el tema de los confinamientos exigidos ante la actual situación de pandemia que vive el mundo entero por la COVID-19.


A. Galindo



 

domingo, 29 de noviembre de 2020

‘Moluka I Bond’: Un cortometraje sobre la intolerancia a las raíces.


Digirido por Alika Maikau, el cortometraje ‘Moluka I Bond’, que se presentó en la

pasada edición del festival internacional de cine del Sudeste del Pacifico en los Angeles

que termino el pasado 31 de octubre y se presentara en el festival de cine de Guam

este año, es un crudo retrato de la manera como la sociedad rompe las barreras de la

reconciliación familiar y busca discriminar el rol del padre dentro de la familia.

Este filme, cuenta la historia un padre hawaiano que busca renovar los lazos con su

hijo de nueve años mientras va a recogerlo a la entrada de su escuela ante la oposición

de su antigua esposa y madre del joven. Con esta premisa su director Maikau, busca

mostrar como el amor de un padre y los deseos de reencontrarse con su hijo son

sentimientos más fuertes que los prejuicios tradicionales de una sociedad que olvida la

importancia del rol paternal para la educación o la crianza de un hijo.

De igual manera, detalles como el arreglo de una sandalia, o las conversaciones sobre

los videojuegos que tenían en común son una excusa argumentativa para mostrar

como son las raíces familiares la fuerza que puede disolver la intolerancia social y tratar

de reconstruir una relación que se ha roto por la intolerancia de la madre, quien niega

al padre volver a estar con su hijo y la perseverancia de un hombre que intenta

recobrar la confianza de su infante.

Así que este profundo corto, ofrece una mirada diferente a las relaciones

intrafamiliares, donde una fotografía de planos generales, así como una edición sin

cortes donde los diálogos, las miradas y los detalles culturales, son una excusa para

lograr que sin importar la nacionalidad o el trasfondo étnico de los protagonistas, las

situaciones allí representadas sean un reflejo de una sociedad que se dice progresista,

pero que discrimina y niega los derechos básicos a un hombre que solo quiere retomar

los lazos con el hijo que nunca ha dejado de amar.

Por lo tanto, ‘Moluka I Bond’, es un retrato con el que los padres se pueden sentir

identificados y una oportunidad de analizar la concepción de la familia moderna vista

desde la interioridad de la cultura Hawaiana en un tiempo donde el hombre es cada vez

más relegado de los roles sociales que en muchas ocasiones ha ejercido con valor y

dignidad.


A. Galindo

martes, 27 de octubre de 2020

‘Basurero’: ‘Un corto sobre la realidad de la sociedad Filipina’.





La productora y escritora Eileen Cabiling, trae bajo el marco del Festival Internacional de Cine Asiático de los Angeles, que termina el próximo 31 de octubre, su primer cortometraje ‘Basurero’, que además de presentarse en el marco de este festival, también podrá ser visto de manera digital en el festival internacional de Cine Asiático en Vancouver, Canadá la primera semana de noviembre de 2020. 

La historia de esta producción se centra en Bong, un humilde pescador filipino, quien debe sobrevivir arrojando los cadáveres de los delincuentes asesinados con el propósito de limpiar del hampa las calles de Manila. Sin embargo, la historia explora la dura vida que afrontan quienes viven de la pesca en esa región del mundo, la manera como con las sobras de otros alimentan a sus familias e incluso el sentir popular sobre el crimen en un lugar del mundo donde la justicia por mano propia es vista con buenos ojos e incluso como una necesidad permanente de la sociedad. 

Este cortometraje de diecisiete minutos de duración sigue a su personaje central por las dos clases de mundos latentes en Manila, uno donde los bares, las fiestas y las vallas publicitarias con personas hermosas gobiernan la vista, y otro, el de las barriadas pobres, donde los pescadores artesanales viven en condiciones precarias, sin recursos para sobrevivir, lleno de estafadores que les ofrecen promesas de un futuro mejor para llevarlos a otro lugar mientras buscan embaucarlos en deudas que no podrán pagar. Y es ese submundo el que obliga a Bong a dejar cualquier ética para encontrar la manera de mantener a su esposa e hijos, mientras va a la iglesia o se persigna no para lograr el perdón divino, sino para encontrar el coraje de seguir adelante en los trabajos que se presenten mientras la cámara explora íntimamente los sueños frustrados de los pescadores por un futuro mejor y la manera como solo la ley del talión se convierte en la única forma de justicia para los más humildes de esa región del mundo. 

Todo esto representado en actuaciones auténticas, y sin halos de falsedad, donde especialmente su protagonista asume su rol con fuerza dramática para denotar su seguridad frente a las acciones que está realizando, así no sean las más políticamente correctas, a la vez que muestra su frustración e impotencia al no poder escapar del círculo de miseria en la que vive con su familia. 

Por lo tanto, ‘Basurero’, es un trabajo honesto y directo que, sin ningún tinte moralizante, ni exageraciones narrativas busca llevar al espectador a encontrar las diferentes realidades que se encuentran en el corazón de una ciudad que es amable y amplia para el turista, pero llena de desigualdades e injusticias para sus más pobres, en un entorno donde la máxima es la supervivencia por encima de cualquier otro sentimiento humano. 

A. Galindo

miércoles, 14 de octubre de 2020

‘A Bedsore’: ‘Un entrecruce de dramas humanos’‘



Después de ser exhibida en el Festival de Cine de Londres, en 2019, llega al Festival de Cine Asiático del Pacífico, en los Ángeles, ‘A Bedsore’, el primer largometraje de la directora Shim HyeJung.

Esta producción, que se presentará del 15 al 18 de octubre en la plataforma streaming de este Festival, cuenta la historia del señor Kang Chang Sik y su familia, quienes sufren por la condición de discapacidad que le generó a la madre un derrame cerebro vascular; además, él tiene un serio conflicto interno al sentir una atracción especial por la persona que cuida a su esposa. 

Sin embargo, su directora Shim HyeJung no toma el camino fácil del melodrama tradicional, sino que explora abiertamente temas controversiales. Uno de ellos es la inmigración ilegal, encarnada en la señora Yoo Soo-Ok, quien es la persona que cuida a la madre enferma y que busca una oportunidad para legalizar su situación y obtener dinero para enviar a su familia que vive en China. 

También se tratan con sutileza y un acertado manejo del realismo, los dilemas éticos del señor Chang Sik, quien a pesar de seguir cuidando a su esposa y pagarle a la señora Sook-Ok para que la cuide, comienza a sentirse atraído por ella e incluso la espía, esperanzado de que ella pueda tener algún sentimiento por él. 

En general, esta producción, centrada en su mayoría en interiores, se vale de los más mínimos detalles para lograr una comprensión más profunda de la trama, y maneja elementos fuertemente metafóricos, como la llaga de la madre y su incapacidad de expresar el dolor que esta le produce, hasta mostrar como cada uno de los personajes va sufriendo de un dolor interno por sus vidas insatisfechas, sin encontrar las palabras, ni la manera de decir lo que en verdad sienten, ni los conflictos que viven, a pesar de estar en una condición social de clase media y gozar de ciertas comodidades financieras como sus propios negocios o familias aparentemente ideales, pero que esconden profundos vacíos emocionales. 

Ese sutil surrealismo logra cautivar al espectador cuando una melodía tradicional de amor ‘The first love’ es la excusa para que se revele la discreta pasión del padre por la cuidadora de su esposa, quien deja rodar unas lágrimas de impotencia al no poder moverse ni manifestar sus emociones, todo ello ayudado por una fotografía sobria, actuaciones sinceras, dramáticas y directas, para escenificar situaciones que pueden presentarse en cualquier cultura.

Por lo tanto, ‘A Bedshore’ es una historia que toca abiertamente temas controversiales como el cuidado de las personas con discapacidad, la infidelidad y la inmigración ilegal, que a pesar de estar cimentados en la cultura surcoreana, sus conflictos y situaciones,  tienen una profunda validez dentro de cualquier sociedad del Planeta. 


miércoles, 23 de septiembre de 2020

El Cine Asiático se toma la ciudad de Los Ángeles





Aunque el poder de la pandemia del Covid 19 ha desolado el mundo de la cultura con el cierre de museos, la cancelación de conciertos y el cierre de las salas de cine, una luz de esperanza se ve hacia el horizonte, con eventos como el lanzamiento del trigésimo sexto festival de cine asiático del pacífico, que este año irá del 24 de septiembre hasta el 31 de Octubre, así como con eventos digitales y presentaciones exclusivas de lo mejor del cine independiente de China, Corea del Sur y Japón entre otros países de ese continente. 
Entre las producciones que más se destacan, están las premieres exclusivas para los Estados Unidos y el mercado occidental de películas como ‘The Paper Tigers’, del director Bao Tan, que cuenta la historia de un grupo de estudiantes de artes marciales que deben vengar la muerte de su maestro a la vez que deben asumir sus responsabilidades como padres, esposos e hijos. Esta cinta ha sido aclamada por la critica por su manera original de abordar el mundo de las artes marciales en una mezcla de acción con drama contemporáneo y un fuerte retrato humano. 

Otra de las grandes producciones que se verán en este festival es ‘Death of Nintendo’, del director filipino Raya Martin, quien regresa con una historia intimista sobre un grupo de adolescentes durante los años noventa, que van madurando a la vez que deben dejar atrás su pasión por los video juegos de esta tradicional consola de videojuegos. 

Pero no solo los relatos de ficción y drama tendrán espacio en este festival, documentales como ‘Patutiki: The Guardians of Marquesan Tatto’, muestran la belleza de las tradiciones de la Polinesia Asiática, donde los directores Christophe Cordier y Heretu Tetahiotupa, ofrecen una perspectiva de la antigua costumbre del tatuaje en las culturas de la Polinesia asiática y el esfuerzo que los descendientes de las tribus tradicionales de la región han hecho para que el gobierno reconozca su derecho a llevar con orgullo sus tatuajes tradicionales, y los estigmas que han padecido las personas que se han hecho estos trabajos estéticos corporales para evitar ser castigados por llevar en sus cuerpos el legado cultural de sus ancestros. 

Asimismo, las audiencias podrán disfrutar de un espacio especial para cortometrajes provenientes de diferentes países asiáticos auspiciado por el canal HBO, llamado ‘Apa Visionaries Short Film Competition’, que este año contará con producciones premiadas en festivales internacionales como ‘Lonely Blue Nights’ de Johnson Cheng y ‘Fine China’ de Tiffany So. Además de un espacio para realizadores jóvenes denominado ‘Armed with a Camera’, que se enfocara en mostrar las producciones de nuevos realizadores realizadas directamente en formato digital. 
Por lo tanto, a pesar de las dificultades, este año promete ser uno de los más innovadores en la historia del festival y una muestra de que el cine y la cultura están en capacidad de sobrevivir ante las adversidades de uno de los años más difíciles en la historia del siglo XXI. 

A. galindo