OBSESION

La nueva producción de director inglés Steven Knight (Locke) es  una historia  sobre un humilde pesquero que se gana la vida llevando turistas a pescar, pero su vida se ve perturbada cuando recibe la inesperada visita de su exesposa, quien le confiesa el maltrato al que ha sido sometida por parte de su nueva pareja. Por lo tanto, le pide que le ayude a cambiar su situación.

Al principio la película parece ser una historia de Baker Bill, un pescador obsesionado por atrapar a un gigantesco atún, que al parecer tiene un significado en su vida. Sin embrago, conforme va trascurriendo la película su argumento comienza a cambiar,  hasta transformarse en un misterioso juego. 

Matthew McConaughey, regresa para darle vida a este personaje, un hombre solitario, alcohólico con una sola motivación, capturar al mencionado pez, pero su objetivo se ve interrumpido cuando aparece una mujer de su pasado (Anne Hathaway), quien regresa a cambiarle su presente en compañía de su violento y cruel esposo.

Por momentos este filme  invade al espectador de cuestionamientos sobre los personajes y la historia, pues el director intenta jugar con el misterio y el suspenso.

Igualmente, pretende incluir el tema de los conflictos morales, en especial en el personaje principal, el cual debe luchar con sus propios demonios para poder cumplir la peligrosa petición de aquella mujer. El director en varias secuencias deja ver una especial conexión entre el pescador y su hijo adolescente.

Además, este largometraje desea ir más allá del drama y el misterio, ya que intenta manipular  la naturaleza de la realidad a través de los personajes.  No obstante,  en ocasiones este elemento juega en su contra, logrando que en ocasiones la trama caiga en lo inverosímil y por momentos se vea forzada.

En definitiva, Obsesión es una cinta con una propuesta arriesgada, con una acertada fotografía y una equilibrada mezcla de drama, misterio y  ficción. Pero, con algunos problemas de guión en la construcción de los personajes y en los puntos giro.