jueves, 1 de agosto de 2019

GAUGUIN EN TAHITÍ






El paraíso perdido’: un lado humano que vale la pena conocer

El pintor posimpresionista francés Eugène Henri Paul Gauguin no solo ha sido considerado uno de los pioneros del simbolismo europeo, sino también su vida aventurera y comprometida con la cultura Polinesia ha sido la inspiración de películas biográficas, donde actores de la talla de Anthony Quinn, Kiefer Sutherland y recientemente Vincent Cassel han representado en la pantalla grande el conflicto de este hombre que dejó todo, incluso su familia, para encontrar su verdadero sentir como artista.

Ahora, el director italiano Claudio Poli, trae el vibrante documental ‘Gauguin en Tahití: El paraíso perdido’, que se presentará dentro de la programación de Cineco Alternativo, en salas seleccionadas de las principales ciudades del país, los días 15, 16, 17 y 18 de agosto. Un fascinante recorrido por la biografía, obra y momentos más importantes de la vida de este artista francés, un acercamiento a su compromiso político con las tribus polinesias y el testimonio exclusivo de sus bisnietos, quienes, a pesar de descender de un maestro de la pintura, hasta ahora se aproximan a su obra o son reconocidos socialmente.

En primer lugar, el documental, bajo la narración del actor italiano Adriano Gianinni, relata los primeros años de Gauguin, desde su infancia con sus padres en Perú, donde comenzó a desarrollar su espíritu viajero e indómito, hasta su regreso a París, en donde conocería a su primer mentor Claude Monet y su amistad con Vincent Van Gogh.

Bajo la guía del biógrafo David Haziot, el espectador logra entender el origen de esa búsqueda insaciable de Gauguin por el sentido del arte; sus deseos de encontrar su propio estilo más allá de los límites del impresionismo y su viaje a las costas Bretonas, donde pintaría una de sus primeras obras ‘Cuatro Bretonas’ (1886).

De igual manera, historiadoras del arte como Caroline Boyle Turner y la curadora del Museo de Arte de Chicago, Gloria Groom, ofrecen una detallada exploración de sus tragbajos durante el primer viaje a Tahití del artista, referenciando las fuentes de inspiración del pintor y su relación con su primera esposa tahitiana, la joven Tehura, que sería la musa de obras como ‘La mujer con flor’ (1891) y ‘El espíritu de los muertos’ (1892), piezas que hoy reposan en Copenhague y Nueva York. 

Asimismo, la escritora francesa Paule Ladon y la curadora del Museo de Arte de Washington, Mary Morton, muestran la segunda etapa de Gauguin en Tahití, donde después de su regreso a Francia y atormentado por una lesión en una pierna debido a una pelea con unos jóvenes, decide radicarse en la isla, cuyos parajes bellos e inhóspitos son contrastados en el documental, al igual que el encanto exótico de las mujeres del lugar. De allí nacerían las mejores obras de Gauguin, como ‘¿De dónde venimos?, ¿A dónde vamos?’, de 1897, la cual hoy en día se encuentra en el Museo de Bellas Artes de Boston, y que realizaría a pesar de los terribles dolores por su lesión y el difícil momento económico y emocional que afectaba su vida, incluida la muerte de su hija en ese mismo año

Por último, se hace un contraste entre el fuerte compromiso que tuvo Gauguin a finales de su vida por la lucha en defensa de las tribus polinesias, que le haría ser llamado el primer nacionalista polinesio, y las disputas con el obispo Martin, mientras de manera muy humana, el director presenta a los bisnietos del artista, sus vidas hoy en día y la manera como los habitantes de la isla hoy recuerdan su residencia en la isla y su incansable deseo de encontrar su propia noción del arte a través de renunciar a todo para dejarse llevar por la búsqueda de una forma más profunda de realizar sus obras.

Así, el objetivo de este documental no es otro que permitir al espectador entender al Gauguin como pintor, ser humano y, sobre todo, como un creador, desafiando en el profundo encuentro con la belleza de Tahití, los convencionalismos existentes dentro del mundo del arte, para dilucidar a un ser humano lleno de matices y ansioso de sentirse libre.

ANGEL GALINDO

No hay comentarios:

Publicar un comentario